
Los jubilados sufrieron un brutal ajuste en el gobierno de Milei.
Fuerte pérdida del poder de compra de los haberes
Un jubilado que en septiembre de 2017 tenía un haber de $20.000 cobró en marzo de 2025 $724.080. Pero, para tener el mismo poder de compra con el que contaba siete años y medio atrás, debería haber percibido en el tercer mes de este año $1.419.620, es decir, casi el doble. Exactamente, un 96% más.
Expresado lo mismo de otra manera, en ese período el ingreso de esa persona, jubilada del sistema general de la Anses, perdió un 49% de su poder de compra. Se trata de alguien que tiene un nivel de ingresos que lo deja afuera del cobro del bono que, desde septiembre de 2022, se les paga a quienes cobran el haber mínimo o un poco más.
En el caso del haber máximo del sistema contributivo de la Anses, en marzo último fue de $1.878.224,89, en tanto que debería ser de $3.768.395 si se busca que sea suficiente para adquirir el mismo conjunto de bienes y servicios que podían comprarse en el noveno mes de 2017 con $53.090,20, la cifra que en ese entonces equivalía al ingreso tope del sistema. En este caso, la caída de la capacidad adquisitiva fue de 50,1%, y haría falta un incremento de 100,6% para la recuperación total del poder de compra que había siete años y medio atrás.
Para quienes cobran el haber mínimo y desde septiembre de 2022 son beneficiarios de un refuerzo -actualmente de $70.000-, el ingreso de $349.121,71 de marzo de este año sirvió para comprar un 32,1% menos de lo que podía adquirirse al finalizar el tercer trimestre de 2017, que fue el momento a partir del cual se perdió casi ininterrumpidamente poder de compra. El monto total debió haber sido de $514.373,75 en el tercer mes de este año o, dicho de otra forma, se requeriría que lo cobrado ahora reciba un incremento de 47,3% para logar un monto que, en términos de poder de compra, sea equivalente al percibido en septiembre de 2017.
En los últimos meses, en rigor, hubo una recuperación parcial de los haberes en términos reales, siempre tomando como referencia el comportamiento que tuvo el Índice de Precios al Consumidor (IPC) del Indec. Se trata de un dato promedio de la variación de los valores de bienes y servicios en todo el país, que puede no representar lo que pasa en cada hogar, porque eso depende de la composición del gasto familiar o personal, y también de otros factores, como el lugar donde se vive. Por ejemplo, si se observa la inflación interanual a marzo, mientras que según el dato promedio nacional fue de 55,9%, en la ciudad de Buenos Aires y de acuerdo con la información del instituto oficial de estadística de la jurisdicción, llegó a 63,5%.
Entre octubre de 2017 y marzo de 2025 la inflación promedio para el país fue de 6998,1%. ¿Qué pasó en el período con las jubilaciones y pensiones de la Anses? Para quienes cobran el haber mínimo, si se considera el bono hoy de $70.000, el ingreso subió nominalmente un 4717,7%.
Eso significa que, si en septiembre de 2017 -el punto de partida de la comparación- alguien tenía $100 y con ellos compraba bienes y servicios que también valían $100, en el segundo momento de la comparación la persona tendrá $4817,7 (por la suba de 4717,7%) y los productos valdrán $7098,1 (al precio original se le agrega el 6998,1%). Así, con el dinero del ingreso se podrá comprar un 67,9% de la canasta de consumos. O, expresado de otra forma, se recortó en un 32,1% la capacidad adquisitiva, porque la inflación fue mucho mayor a los reajustes.
En el caso del haber máximo, la suba total del período fue bastante inferior, de 3437,8%. Por eso, la caída del poder de compra fue mayor al 50%. Y para quien en 2017 tenía un haber mensual de $20.000, la variación nominal resultó de 3520,4%, lo cual determinó una pérdida del poder de compra de 49%.

Se pronostica una cosecha histórica
