
La cancha hecha con tapitas.
Hicieron un piso con tapitas de gaseosas
El Club Juventud Alianza de Despeñaderos es una de las dos instituciones deportivas de la ciudad cordobesa de 6.000 habitantes y en las últimas semanas se convirtió en una tendencia nacional por una novedosa actividad. En conjunto con la Municipalidad de la localidad y una fundación internacional, reciclaron tapitas de gaseosas para poder hacerle el piso deportivo a su cancha de básquet.
Matías Tabares, presidente del club, dio detalles de cómo surgió este proyecto y comentó las sensaciones luego de haber conseguido la cancha: “Estamos muy felices de haber logrado nuestro objetivo que era tener nuestro piso deportivo hecho de tapitas de plástico, tapitas de gaseosa”, expresó. Luego ahondó en detalles sobre esta acción: “En el marco del Programa Fondos Juventud y Acción Climática impulsado por la Municipalidad de Despeñaderos y Bloomberg Philanthropies, una fundación creada por el exalcalde de Nueva York con el objetivo de trabajar por el impacto climático en el mundo, nuestro proyecto se llamó ‘Ecosport’. Este tenía como principal objetivo reutilizar las tapitas de gaseosa en un piso encastrable para nuestra cancha de básquet”.
Para llevar adelante este proyecto, “nos comunicamos con la empresa PLC Solutions que fue la que le instaló la cancha a Atenas. Entre las reuniones y las charlas que teníamos con la empresa, nos dijeron que con las tapitas de gaseosa podíamos aportar la materia prima para construir la cancha y con los fondos que nos daba la fundación Bloomberg, que eran 5.000 dólares, podíamos lograr tener nuestra cancha de piso deportivo de material reciclado”.
“Hicimos una campaña enorme en el pueblo y localidades vecinas. Teníamos que juntar casi dos toneladas de tapitas, que no pesan nada. Teníamos varios garajes llenos de tapitas, pero todavía no nos alcanzaba. Hasta que logramos completar lo que necesitábamos. El promedio era cada metro cuadrado, 3.5 kilos de tapitas de gaseosa. Fue un trabajo entre todos, unidos, y ayudados, por ejemplo, por la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Córdoba. Ellos nos aportaron dos bolsones gigantes que tenían de tapitas”, comentó el presidente de la institución sobre cómo lograron conseguirlas. Enseguida agregó: “Teníamos distintos puntos para juntar las tapitas, así que los vecinos del pueblo pasaban por ahí, las dejaban y nosotros las recolectábamos y separábamos por color”.