
Con condimento electoral, se reavivió la pelea por el paso bajo nivel.
Fuertes cruces políticos entre Berestein y Balestrasse por la obra del paso bajo nivel
Con el aditamento del año electoral, la obra del paso bajo nivel de Rivadavia y las vías del tren sumó una nueva polémica, esta vez, por las demoras que tuvo el proyecto, con fuertes cruces políticos entre el meonismo y el municipio.
“Es lamentable observar cómo muchas veces la mezquindad y la especulación han obstaculizado y dilatado la concreción de obras claves para Junín”, disparó el ex concejal y dirigente del Frente Renovador Maximiliano Berestein, en referencia a la gestión municipal.
Y fue el propio secretario de Obras Públicas del municipio quien salió al cruce: “Fue el propio Estado nacional que, con sus internas partidarias y su ineficiencia, retrasó una obra que ya debería estar finalizada”. Y el funcionario petrequista aseguró que la coyuntura económica y los constantes aumentos de precios por la inflación afectaron de manera notoria el avance de la obra.
Balestrasse: “Se trabajó en conjunto”
Balestrasse destacó el rol central del municipio para la concreción de la obra y aseguró que, desde el primer minuto, se trabajó en conjunto tanto con los equipos técnicos de la ADIF como con la empresa adjudicataria.
En este sentido, el arquitecto señaló: "Desde el inicio mismo del proyecto trabajamos con los equipos de diseño de la obra para lograr el mejor anteproyecto, no sólo desde el punto de vista vial, sino también desde lo urbanístico. Y, posteriormente, cuando se licitó y la empresa adjudicataria tuvo que realizar el proyecto ejecutivo también lo hicimos en conjunto".
"De ello puede dar fe el hacedor del proyecto, arquitecto Hugo Larrotonda, con quien tuvimos innumerables idas y vueltas para lograr el mejor proyecto, no sólo del paso bajo a nivel, sino también del puente y la pasarela peatonal", agregó.
En esta línea, Balestrasse aseguró que el municipio, además, llevó adelante una audiencia pública coordinada con el asesor del ministerio de Transporte de la Nación, Damián Itoiz, como parte del estudio de impacto ambiental necesario para la obra.
"Esta audiencia pública nos permitió escuchar a los vecinos y residentes del sector y realizar modificaciones al proyecto original para evitar inconvenientes técnicos, estructurales y ambientales que afecten su calidad de vida durante y luego de finalizada la obra.
Respecto de los plazos, en tanto, el arquitecto afirmó que fue el propio Estado Nacional que, con sus internas partidarias y su ineficiencia, "retrasó una obra que ya debería estar finalizada" y aseguró que la coyuntura económica y los constantes aumentos de precios por la inflación afectaron de manera notoria el avance de la obra.
"Fue la CNRT quien tardó seis meses en autorizar la implantación de un pilar de hormigón necesario para la construcción del puente peatonal y otros tantos en lograr la aprobación entre sus pares. Lamentablemente, tardaron mucho tiempo en ponerse de acuerdo entre las mismas dependencias del Estado Nacional", dijo.
"Desde el Municipio no dilatamos la recepción de la obra bajo ningún punto de vista. Sólo tuvimos que hacer las correcciones necesarias y exigimos que se solucionaran las roturas hechas en la Plaza del Andén y en el Parque Central, porque eso es de los vecinos de Junín", dijo Balestrasse.
En otro orden, aclaró que también se trabajó y se sigue trabajando en conjunto con la empresa en lo que tiene que ver con el ordenamiento del tránsito para darle la mayor fluidez posible mientras se realizan los trabajos".
"No comparto en absoluto las palabras mezquinas del ex concejal, que lo único que pretende es hacer una campaña política ensuciando una gestión que, desde el primer momento, se comprometió con el ex ministro Mario Meoni en colaborar para que esta obra se concrete en beneficio de todos los juninenses".
Berestein: “Se dilató su inicio”
“Junín se encuentra en medio de un proceso de transformación que promete cambios significativos para su futuro. Sin embargo, es lamentable observar cómo muchas veces la mezquindad y la especulación han obstaculizado y dilatado la concreción de obras claves para Junín, como es el caso del paso bajo nivel, financiado por el Gobierno nacional a través del Ministerio de Transporte”, afirmó Berestein.
Y agregó: “Como lo expresaba Mario, es innegable que una intervención urbanística de esta magnitud resulta crucial para una ciudad como Junín. No sólo implica una mejora en la movilidad y la fluidez del tránsito, sino que también representa una oportunidad para el crecimiento económico y social de la región”.
“Un paso bajo nivel facilitará la conectividad entre distintos puntos de la ciudad, optimizando los tiempos de desplazamiento y disminuyendo los riesgos de accidentes, en medio de un fuerte crecimiento de la circulación del transporte ferroviario”, dijo.
Y añadió: “Además, permitirá potenciar el desarrollo urbanístico y fomentar nuevas inversiones en la zona”.
“Sin embargo, resulta desconcertante observar cómo la gestión municipal ha adoptado una postura ambivalente respecto a esta obra tan necesaria. En primer lugar, se puso en duda la necesidad de su realización y se dilató su inicio casi un año, para convocar a una audiencia pública que, finalmente, como era de esperar, avaló la obra con contundencia. Luego, se dilató más de 6 meses la inauguración del puente peatonal, parte integral de la obra y condición previa para el inicio de la intervención sobre calle Rivadavia, por no querer incorporar este paseo al espacio público local”, cuestionó.
“Y, finalmente, y más preocupante aún fueron las declaraciones de funcionarios municipales afirmando que ‘es mejor si la obra no se realiza’, cuando ya era inevitable su comienzo”, afirmó.
“Esta actitud, lejos de representar los intereses de los ciudadanos, muestra una falta de visión y compromiso con el desarrollo de la ciudad. Estas actitudes caprichosas son las que alejan a las personas de la actividad política y desacreditan el ejercicio de representación. A pesar de las diferencias debemos siempre priorizar el bienestar de la comunidad. Lo importante no es la rivalidad política, ni la titularidad de proyectos, sino el impacto positivo que estos tienen en la calidad de vida de los ciudadanos. En Junín, la concreción del paso bajo a nivel significa un paso adelante, hacia un futuro más próspero, seguro y conectado. Este es el objetivo en el que todos tenemos que estar trabajando”, consideró.